La Mesada cría cabra Bermeya para aprovechamiento de pastos.
Esta raza autóctona asturiana, considerada como raza de protección especial, incluye a animales eumétricos, ligeramente ensillados, muy ágiles, vivos, de tronco manifiestamente profundo respecto a su alzada, cabeza triangular, bien desarrollada, orejas de tamaño medio y perfil subcóncavo, hocico sonrosado y sin manchas.
La alzada es de 73,3 cm en las hembras y 79,5 cm en los machos. El peso de este resistente animal, capaz de producir cabritos de gran calidad, varía entre los 45 y 50 kg en el caso de las hembras y 65 y 70 kg para los machos.